La modernización y «los cerdos asados»

En los últimos días hemos visto como el Ministro del Interior y su par de Hacienda hicieron un llamado (arenga) a la Modernización del Estado a todas las autoridades del estado (subsecretarios, jefes de servicio), en la cual estuvieron presentes los temas de siempre: gerencia pública, recursos humanos, gestión y calidad de servicios, descentralización, perfeccionamiento institucional, participación ciudadana y reformas políticas.

El gran ausente de siempre fueron las TI al menos enforma explicita, y eso que los principales ejemplos de modernización y alos que se hecha mano siempre están basados en usos intensivos de TI, pero bueno eso vuelve a mostrar el peso estas herramientas tienen para nuestras autoridades (les recuerdo este artículo, Los temas TIC no son tema)
Quiero colgarme de este evento para compartir con ustedes este texto que me envió mi amigo Mario Waissbluth en el que se muestra una interesante aproximación a los procesos de cambio y modernización, se los recomiendo muchísimo

__________

Cerdos Asados

Fábula de los Cerdos Asados

por: Gustavo Francisco Cirigiliano

Cierta vez se produjo un incendio en un bosque en el que se encontraban cerdos.
Estos se asaron.

Los hombres, acostumbrados a comer carne cruda, los probaron y los hallaron exquisitos.

Luego, cada vez que querían comer cerdos asados, prendían fuego a un bosque.
¿Pero que sucedió cuando se intentó modificar “El Sistema” para implantar uno nuevo?.

Hacía tiempo que algunas cosas no marchaban bien: los animales se carbonizaban, a veces quedaban parcialmente crudos; otras, de tal manera quemados que era imposible utilizarlos.

Como era un procedimiento montado en gran escala preocupaba mucho a todos, porque, si El Sistema fallaba en gran medida, las pérdidas ocasionadas eran igualmente grandes.

Miles eran los que se alimentaban de esa carne asada y también muchos miles eran los que tenían ocupación en esa tarea. Por tanto, “El Sistema” simplemente no debía fallar.

Pero, curiosamente, a medida que se hacía en mayor escala, más parecía fallar y mayores pérdidas causar. En razón de las deficiencias, aumentaban las quejas. Ya era un clamor general la necesidad de reformar a fondo El Sistema.

Tanto que todos los años se reunían congresos, seminarios, conferencias, jornadas para hallar la solución. Pero parece que no acertaban a mejorar el mecanismo, porque al año siguiente se volvían a repetir los congresos, seminarios, conferencias y jornadas. Y así siempre.

Las causas del fracaso de “El Sistema”, según los especialistas, debían atribuirse o bien a la indisciplina de los cerdos que no permanecían donde debieran, o bien a la inconstante naturaleza del fuego tan difícil de controlar, a los árboles excesivamente verdes, o a la humedad de la tierra, o al Servicio de Informaciones Meteorológicas que no acertaba con el lugar, momento y cantidad de lluvias, o…

Las causas eran -como se ve- difíciles de determinar porque en verdad El Sistema para asar cerdos era muy complejo: se había montado una gran estructura; una gran maquinaria, con innumerables variables, se había institucionalizado. Había individuos dedicados a encender: los igniferi, que a su vez eran especialistas de sectores; incendiador o ignifer de zona norte, de zona oeste, etc., incendiador nocturno, diurno, con especialización matinal o vesperal, incendiador de verano, de invierno (con disputas jurisdiccionales sobre el otoño y la primavera). Había especialistas en vientos (anemotécnicos). Había un director general de Asamiento y Alimentación Asada, un director de Técnicas Igneas (con su Consejo General de Asesores), un administrador general de Forestación Incendiable, una Comisión Nacional de Entrenamiento Profesional en Porcología, un Instituto Superior de Cultura y Técnicas Alimentarias (el ISCYTA) y el BODRIO (Bureau Orientador de Reformas Igneo-Operativas).

El BODRIO era tan grande que tenía un inspector de reformas cada 7000 cerdos, aproximadamente. Y era precisamente el BODRIO el que propiciaba anualmente los congresos, seminarios, conferencias y jornadas. Pero éstos solo parecían servir para aumentar el BODRIO, en burocracia.

Se había proyectado y se hallaba en pleno crecimiento la formación de nuevos bosques y selvas, siguiendo las últimas indicaciones técnicas (en regiones elegidas según una determinada orientación y donde los vientos no soplaban más de tres horas seguidas, donde era reducido el porcentaje de humedad, etcétera).

Había miles de personas trabajando en la preparación de esos bosques que luego se habrían de incendiar.

Había especialistas en Europa y en los EE.UU. estudiando la importación de las mejores maderas, árboles, cepas, semillas, de mejores y más potentes fuegos, estudiando ideas operativas (por ejemplo: cómo hacer pozos para que en ellos cayeran los cerdos). Había además grandes instalaciones para conservar los cerdos antes del incendio, mecanismos para dejarlos salir en el momento oportuno, técnicos en su alimentación.

Había expertos en la construcción de establos para cerdos; profesores formadores de los expertos en la construcción de establos para cerdos; universidades que preparaban a los profesores formadores de los expertos en la construcción de establos para cerdos; investigadores que brindaban en(el?) fruto de su trabajo a las universidades que preparaban a los profesores formadores de los expertos en la construcción de establos para cerdos; fundaciones que apoyaban a los investigadores que brindaban el fruto de su trabajo a las universidades que preparaban a los profesores formadores de los expertos en la construcción de establos para cerdos, etc.

Las soluciones que los congresos sugerían eran por ejemplo: aplicar triangularmente el fuego luego de raíz cuadrada de n . 1 por velocidad de viento sur; soltar los cerdos quince minutos antes que el fuego promedio del bosque alcanzara 47º C; otros decían que era necesario poner grandes ventiladores que servirían para orientar la dirección del fuego. Y así por el estilo. Y no se necesita decirlo, muy pocos de los expertos estaban de acuerdo entre sí, y cada uno tenía investigaciones y datos para probar sus afirmaciones.

Un día, un ignifer Categoría S-O/D-M/V-LL (o sea un encendedor de bosques especialidad sudoeste, diurno, matinal, licenciatura en verano lluvioso), llamado Juan Sentido-Común, dijo que el problema era muy fácil de resolver. Todo consistía, según él, en que primero se matara al cerdo elegido, se lo limpiara y cortara adecuadamente y se lo pusiera en un enrejado metálico o armazón sobre unas brasas hasta que por efecto del calor y no de la llama se encontrara a punto.

-¿Matar? -exclamó indignado el Administrador de Forestación.
-¡Cómo vamos a hacer que la gente mate! Ahora el que mata es el fuego. ¿Nosotros matar? ¡Nunca!

Enterado el director general de Asamiento, lo mandó a llamar. Le preguntó qué cosas raras andaba diciendo por ahí, y luego de escucharlo, le dijo:

-Lo que usted dice está bien, pero solo en teoría. No va a andar en la práctica. Más aún, es impracticable. Veamos, ¿qué hace usted con los anemotécnicos, en el caso de que se adopte lo que sugiere?
-No sé -respondió Juan.

-¿Dónde coloca los encendedores de las diversas especialidades?
-No sé.

-¿Y los especialistas en semillas, en maderas? ¿Y los diseñadores de establos de siete pisos, con sus nuevas máquinas limpiadoras y las perfumadoras automáticas?
-No sé.

-Y a los individuos que han ido al extranjero a perfeccionarse durante años, y cuya formación ha costado tanto al país, ¿los voy a poner a limpiar cerditos?
-No sé.

-Y los que se han especializado todos estos años en integrar congresos y seminarios y jornadas para la reforma y mejoramiento de El Sistema, si lo suyo resuelve todo, ¿qué hago con ellos?
-No sé.

-¿Se da usted cuenta ahora de que la suya no es la solución que necesitamos todos? ¿Usted cree que si todo fuera tan simple no la hubieran hallado antes nuestros especialistas? ¡A ver! ¿Qué autores dicen eso? ¿Qué autoridad puede avalar su sugestión? ¡Usted se imagina que yo no puedo decirles a los ingenieros de anemotécnica que es cuestión de poner brasitas sin llama! ¿Y qué hago con los bosques ya preparados, a punto de ser quemados, que solo poseen madera apta para el fuego-en-conjunto, cuyos árboles no producen frutos, cuya escasez de hojas hace que no sirvan para sombra? ¿Qué hago? ¡Dígame!
-No sé.

-¿Qué hago con la comisión Redactora de Programas de Asado, con sus departamentos de Clasificación y Selección de Cerdos, Arquitectura Funcional de Establos, Estadística y Población, etcétera?
-No sé.

-Dígame: el ingeniero en Porcopirotecnia, Don J. C. de Figuración, ¿no es una extraordinaria personalidad científica?
-Sí, parece que sí.

-Bueno. El simple hecho de poseer valiosos y extraordinarios ingenieros en pirotecnia indica que El Sistema es bueno. Y, ¿qué hago yo con individuos tan valiosos?
-No sé.

-¿Ha visto? Usted lo que tiene que traer como solución es cómo hacer mejores anemotécnicos, cómo conseguir más rápidamente encendedores del oeste (que es nuestra dificultad mayor), cómo hacer establos de ocho pisos o más, en lugar de solo siete como ahora. Hay que mejorar lo que tenemos y no cambiarlo. Tráigame usted una propuesta para que nuestros becarios en Europa cuesten menos, o cómo hacer una buena revista para el análisis profundo del problema de la Reforma del Asamiento. Eso es lo que necesitamos. Eso es lo que el país necesita. ¡A usted lo que le falta es sensatez, Sentido-Común! Dígame, por ejemplo, ¿qué hago con mi buen amigo (y pariente) el presidente de la comisión para el Estudio para el Aprovechamiento Integral de los Residuos de los ex Bosques?
-Realmente estoy perplejo -dijo Juan.

-Bueno. Ahora que conoce bien el problema, no vaya por ahí diciendo que usted lo arregla todo. Ahora ve que el problema es más serio y no tan simple como se imaginaba. Uno desde abajo y desde afuera dice.

Pero hay que estar adentro para conocer el problema y saber las dificultades. Ahora, entre nosotros, le recomiendo que no insista con lo suyo porque podría traerle dificultades con su puesto. ¡No por mí! Yo se lo digo por su bien, porque yo lo comprendo; yo le entiendo su planteo, pero, usted sabe, puede encontrarse con otro superior menos comprensivo; usted sabe cómo son, a veces ¿eh?…

El pobre Juan Sentido-Común no dijo ni mú. Sin saludar, entre asustado y atontado, con la sensación de estar caminando cabeza abajo, salió y no se le vio nunca más. No se sabe dónde fue. Por eso es que dicen que en estas tareas de reforma y mejora de El Sistema, falta Sentido-Común.

La “Fábula de los cerdos asados”, de Gustavo F. J. Cirigliano, fue
publicada originalmente en la revista Cátedra y Vida, Buenos Aires,
1959.

 

Comparte este artículo en

17 comentarios

  1. Completamente de acuerdo con la «Fábula de los cerditos asados». Por mi parte agregar que lo más irritante es que en el bosque de «más allá» los hombres aprendieron a dominar el fuego y optaron por asar a pequeña escala años atrás, pero el chovinismo, la falta de horizontes y la miopía de los líderes y cortesanos de nuestra aldea les impide a éstos adoptar las medidas apropiadas. Una adición para considerar en el mes de la patria.

    Una duda ronda en mi cabeza, Alejandro. La historia la traes a cuentas de las arengas de Hacienda e Interior, ¿qué rol juegan ellos en la fábula? ¿gestores del sistema o invocadores del sentido común? De tus palabras, me parece entender que son ruido y nada de nueces. ¿Estoy en lo cierto?

  2. Alberto muchas gracias por tu comentario y un gusto saber de ti, respecto a tu pregunta que comes que adivinas!!

    No has vista la cantidad de veces que tenemos perfectamente claro lo que hay que hacer para mejorar el sistema y no lo adoptamos por «múltiples razones» algunas incluso de Estado

     

  3.  

    Estimado Don Alejandro:

    La fabula calza a la perfección con esta y otras realidades. En
    algún momento escuche decir que todo cambio aumenta entropía de todo sistema, o
    sea, aumenta el caos en el sistema, esta sería una chiva  razón
    teórica para evitar cambios, dado los trastornos que estos generarían. Esto se
    puede rebatir de la siguiente forma: la entropía en todo sistema aumenta con el
    tiempo y a medida que este avanza puede ser tal que el caos que genere un
    cambio sea menor. Con esto quiero decir que si no se le «pone el cascabel
    al gato» con prontitud no se hará nunca, ya que cada vez que se discuta el
    tema este tendrá una mayor complejidad.

    Quizás hay que empezar ha enseñar a «matar» a la gente y
    reeducar a todos los especialistas que ha generado «el Sistema»

    Saludos 

     

  4. Estimado Miguel: gracias por el comentario, tu reflexión me lleva a pensar en un dicho que uso muy a menudo «demasiada genente inteligente junta genera entropía y no necesariamente valor agregado»

    Saludos

  5. Hola Alejandro. Muy inspiradora tu historia y en realidad bastante «universal» cuando se trata de entender la manera en que reforma y status quo se enfrentan, sobre todo en el ambito p’ublico. Me quedo pensando que hay algo peor que simplemente quedarse donde estas (es decir mantener el «Sistema») que consiste en reformar mal: amarrar a los cerdos vivos a la parrilla , poner la parrilla arriba de un arbol parado y prenderlo, etc… Transantiago es un ejemplo de eso, muchas malas adopciones de TICs en Chile tambien lo son. despues de todo, en TICs no todo son logrosy buenas practicas 🙂 

    Por ejemplo procesos de FDT en acceso publico, y una serie de otras iniciativas en infocentros;  tramites p’ublicos en  linea mal hechos (m’as caros y lentos que un tramite presencial! ), decisiones erradas y efectistas de equipamiento tecnologico para las escuelas, etc…

    Interesanteque estos temas esten en la discusion de modernizacion del estado. Pero quiza lo peor es que si se entendiera realmente que una incorporacion efectiva de TICs puede implicar la desaparicion de la «Oficina de Partes» , habria aun mas oposicion!

    Saludos

     

    Florencio

     

     

     

     

     

     

  6. Florencio,

    Gracias por tu comentario, efectivamente hemos chacrado el concepto de modernización y perdimos de vista su objetivos final, mejores servicios con un enfoque ciudadano céntrico

    Saludos

  7. Me encantó la fábula…(en lo de los TI, soy ignorante total). Pero medio pariente de Juan Sentido Común, somos muchos, lamentablemente ninguno o casi ninguno, ocupa un cargo gubernamental ni en Chile, ni en muchos países…Hubiese andado tan bien esta historia para habersela enviado a Cristina F.de Kirchner… quizás la conoce (porque es de un argentino), pero como muchos se hace la que no escucha y la que no ve nada. 

    Que suerte la nuestra…aunque según Eduardo Galeano, cada pueblo tiene el gobernante que elige y no el que merece.

    Hay que recordar a la hora de votar.

    Saludos desde Baires.

     

     

    – un cronopio es una flor, dos son un jardín –

    – Malú –

  8. Encuentro una gran inspiración entre esta fábula y lo que ahora estamos trabajado con la Reforma Integral de Educación Media Superior. Me parece que el sistema es lo que nosotros permitamos que sea, es cierto falta sentido común pero también información que nos permita discutir qué es lo importante y que es lo urgente en muchos aspectos de la vida cotidiana. Quiero preguntarle ¿Qué relación encontraría usted con respecto a la fábula y el sistema educativo en América Latina?

    Gracias por leer este comentario. Saludos desde México.

  9. Gracias Luis por tu comentario, creo que tienen mucha relación, en nuestros países existen una amplia mayoría de que el sistema educativo no da para más, pero en muchas ocasiones las soluciones que se plantean carecen de total sentido común.  Muchas veces armamos una solución para resolver algo que no requiere ser resuleto y dejamos de resolver lo necesario

     

    Saludos

    Alejandro Barros

  10. Cuantos quijotes existen en este mundo peleando contra la maquinaria movida por los vientos de las personas escogidas por el gobernante de turno para intentar dirigir los caminos de la educacion,el motivo de mi pensamiento es que se ha metalizado la educacion ahora cada estudiante no es persona,sino que es el valor de la mensualidad que cada apoderado ingresa a las arcas del colegio y por ende llega a las arcas de grandes grupos economico, que va a vender el colegio cuando ya no sea rentable.La importancia de la persona humana pasa a segundo orden, y los colegios no los hacen el edificio, no lo hacen los transportes,no lo hacen el mobiliario, LO HACEN LOS ALUMNOS Y SU FAMILIA,LOSASISTENTES DE EDUCACION,LOS PROFESORES, PERSONAS EN DIVERSOS ROLES,PERSONAS AL FIN. Por este motivo apoyo esta iniciativa que busca rescatar la importancia de las persona humana.-

  11. Estimado Alejandro, el año 2007 envié un mensaje a todos los Senadores planteándoles la necesidad de modificar algunos aspectos de la Ley Tributaria. En concreto, la necesidad de solucionar un problema que se arrastra desde siempre y que a todas luces es inconsecuente.

    Los proveedores del estado facturan a las instituciones que compran sus productos o servicios. El estado demora bastante más que 30 días en cancelar esos documentos. Los proveedores por tanto, deben financiar el pago de impuestos que el mismo estado les debe. Es decir. el estado se convierte en moroso de impuestos que obliga a pagar a los proveedores del estado.

    Los proveedores por otro lado, salen a buscar financiamiento a la banca o a prestamistas (si ya tienen copado su crédito). En muchos casos, el margen de utilidad desaparece o, peor aún, el ingreso percibido es menor al egreso producto de esa venta. Y después un conspícuo funcionario dice no entender por qué las PYMES no son mayoría entre los proveedores del estado.

    Soluciones propuestas:

    1.- Factura Exenta para todas las ventas al estado.

    2.- Factura Electrónica (sistema SII publicado en Mercado Público) al que acceden todos los proveedores. La institución deuodora paga el IVA de su compra, directamente a la Tesorería. Al proveedor se paga solamente el Neto. El proveedor paga el PPM una vez cancelada la Factura.

    Para educación, otro tanto. Presenté el año 2006 una propuesta, después de realizar un estudio en terreno, en 150 municipios del país. Desde Calama hasta Puerto Mont. Al parecer a los funcionarios del estado, se les olvida que para aplicar TI, deben preocuparse de desarrollar una Planificación Integral en cuatro ámbitos:

    1.- Hardware-Concetividad

    2.- Sistemas, contenido, soporte y mantención y, actualización

    3.- Capacitación a todos los usuarios en los sistemas y metodología propuesta. (uso de los sistemas, Manual de Procedimientos y funciones).

    4.- Auditoría permanente de los procesos y resultados esperados en los indicadores definidos.

     

    Aún me pregunto la razón por la cual no se crea una Subsecretaría TI, que tenga a su cargo el Plan Informático global para todas las instituciones del estado. Que se encargue de delinear todas las políticas informáticas y desarrollarlas centralizadamente. Cuánto dinero se ha despilfarrado cuándo cada ministerio licita por su cuenta, por ejmplo la OIRS, los sistemas administrativo-contables, etc. Tampoco veo un planteamiento «racional» en los prigramas de los candidatos.

    Excelente publicación, saludos.

  12. Gracias Roberto por tus comentarios, efectivamente cuesta mucho avanzar en este tema, el mundo político no lo  tiene del todo comprado, hace algún tiempo escribi algo sobre la materia, el artículo se llamaba Los temas TIC no son tema, lo puedes ver aquí

    Ahora respecto de tu plantemaiento de una institucionalidad más robusta lo comparto plenamente y lo he dicho donde he podido, creo que el modelo debiera ser:

    – Subtel se separa en dos, una Superintendencia de Telecomunicaciones (como cualquier otro servicio básico) y un área promotora de las telecomunicaciones

    – Esa área de promoción se junta con Estrategia DIgital, hoy residente en el Minsiterio de Economía

    – Se crea una Subsecretaría de Tecnologías de Información y Comunicaciones dependiente del Ministerio de Economía.

     

    Puedes ver algo de estas propuestas aqui

  13. Estimado Alejandro Barros:

    Execelente fábula!!!Me surge una duda y agradeceré mucho me dé su opinión al respecto:

    Dentro del Sistema ¿quienes estarían configurados en el BODRIO?

    Muchas Gracias!!

  14. Es dificil determinar exactament el sentido comun de la fabula pero es facil establecer el claro desorden y la falta de un verdadero plan de accion de quienes incendiaban los bosques para obtener un eficaz proceso de asar los cerdos me gusta mucho la fabula ayuda a ser mas concisos y presisos en nuestros objetivos

  15. Estimando Alejandro, muy buena la fábula (sobre todo la descripción del circo de los congresos de reformadores ;)) aunque me parece que es un poquito «tecnocrática». Aunque sea terrible, las preguntas que le plantea el burócrata al Sr. sentido común son claves y hacen a la complejidad del problema. El problema de la modernización no solo es técnico sino, y sobre todo, es político.

    No entender esto lleva a cometer barbarismos tecnocráticos que irremediablemente llevan al fracaso de las reformas. (Su compatriota Carlos Matus lo explica brillantemente)

    Saludos desde Argentina!

  16. Gracias Juan Ignacio por el comentario, efectivamente el problema de la modernización no es sólo técnico, quien diga lo contrario no entiende el estado, pero creo que en muchos casos técnicos y políticos no han sabido establecer diálogos adecuados, y en genral se habla desde su lado y con poca comprensión mutua.

    —————–

    Alejandro Barros

Deja un comentario:

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Blog eL ABC de Alejandro Barros

Suscríbete a newsletter

En este espacio reflexiono sobre Modernización del Estado, Innovación Pública, Desarrollo Digital, tecnologías de información y otras yerbas.