Información Pública: cuando se abusa de una buena política pública

El acceso a la información pública al servicio del SPAM, o cómo una buena política pública se puede usar de mala forma.

El acceso a la información pública al servicio del SPAM, o cómo una buena política pública se puede usar de mala forma.

Hace unos días recibí un correo electrónico de  una empresa dedicada la oferta de garantías recíprocas, me refiero a la empresa MásAval, la cual me ofrecía en mi calidad de usuario y representante de una empresa inscrita en el sistemas de compras públicas Chilecompra, una linea de garantías pre-aprobadas por un monto de 120 millones de pesos, para efectos de poder garantizar ofertas en futuras licitaciones públicas del Chilecompra.  Algo que sorprende del mail, este viene con los logos de la Dirección de Compras Públicas y Corfo al pié de firma, lo cual le da un aspecto de mail oficial.

Mail de promoción comercial de MásAvala


Lo que me llamó la atención, es que no conozco dicha empresa, ni menos aún he solicitado que me envíen información de sus producto o servicios.  Ante esto, me contacté con personal de Chilecompra y pregunté respecto de como estas empresas obtienen la información de los proveedores inscritos en su sistema, la respuesta que se me dió, fue que estas empresas solicitaban el registro de  empresas inscritas en dicho sistema, usando para ello las normativas de Transparencia, desconozco cuantas empresas han realizado solicitudes similares en el pasado.

Hasta ahí todo bien, si consideramos dicho registro de carácter público, pero ante mi consulta de si se puede obtener el listado de las empresas que han solicitado el registro de proveedores, se me dijo que, había que pedir la autorización previa del solicitante, para que me dieran la información, aquí la cosa empezó a enredarse, “ya que empresas pueden pedir mis datos, pero yo no puedo saber  quienes fueron”, mi intención era monitorear desde donde me llegaban mails no deseados y solicitar que ese envío se detuviera.

Parece extraño este nivel de asimetría en el uso de la información, ya que si una empresa solicita el listado de proveedores (al menos nombre y correo electrónicos por lo que supe) para labores comerciales, incluyendo el envío de mensajes no solicitados o derechamente SPAM, y que el receptor no pueda saber quienes mantienen esas base de datos además del Chilecompra me parece una relación bastante poco simétrica.

Esto no parece un uso muy adecuado de la información que reside en las bases de datos del Chilecompra.


Siempre he sido un promotor del acceso a la información pública, pero pedir bases de datos para hacer SPAM me parece que es un poco mucho.

Comparte este artículo en

2 comentarios

  1. Excelente tu reclamo Alejandro, tienes toda la razón en exigir que la información sea para ambos lados. ¿Quien fiscaliza el cumplimiento de la ley de trasparencia?. Tal vez habría que hacer llegar el reclamo allí.

Deja un comentario:

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Blog eL ABC de Alejandro Barros

Suscríbete a newsletter

En este espacio reflexiono sobre Modernización del Estado, Innovación Pública, Desarrollo Digital, tecnologías de información y otras yerbas.