Mejorando las compras TI en el Estado
Hace algún tiempo escribí sobre las compras públicas TI, me gustaría retomar este tema sobretodo en un punto que me parece muy relevante a la hora de emular las mejores prácticas mundial, recordemos que la Dirección de Compras y Contratación Pública definió un conjunto de mejores prácticas para la adquisición de Tecnologías de Información por parte del Estado, me siento muy parte del proceso de diseño de esas Directivas ya que me tocó participar directamente en su discusión y armado.
Desconozco si a la fecha estas prácticas han sido adoptadas por los servicios, o en que medida han servido para mejorar los procesos de adquisición de tecnologías, creo que sería bueno realizar una evaluación tanto desde el sector público como de la industria, les recuerdo las principales objeciones de los actores relevantes en los procesos de compras TI (proveedores y clientes), las que corresponden a una evaluación que se realizó con el objeto de trabajar la directivas:
- Ausencia de mecanismos que permitan una negociación final
- Modelo contractual excesivamente rígido
- Requerimientos mal (pobremente) definidos
- Poca experiencia de proveedores, mala estimación de costeo y tamaño del proyecto.
- Presupuestos no acordes con los costos reales de la solución
- Criterios (ponderaciones) de evaluación mal definidos.
- Exigencias administrativas a proveedores ponen barreras de entrada
- Adopción de metodologías de desarrollo/diseño aún no probadas
- Proceso licitatorio mal definido y/o con tiempos inadecuados
- Petición de soluciones en las que hay subsidios cruzados
- Indefinición de mecanismos y responsables de solución antes de recibir las ofertas.
- Modelo de licitación excesivamente rígido
En la directivas mencionadas (Directivas Compras TIC) se hace referencia a cláusulas sobre propiedad intelectual en su punto 1.2.2.6, el documento es descriptivo respecto de las diferentes alternativas y los efectos (ventajas y desventajas) que tiene adoptar los diferentes caminos planteados.
Quiero concentrarme en este tema ya que por lo que me ha tocado conocer los países con mayor desarrollo industria y en particular mejores prácticas en eGov han adoptado una modalidad de usar al Estado como un potenciador de su industria tecnológica a través de sus adquisiciones, dado el tamaño como comprador que tiene, para ello han utilizado básicamente dos políticas que me parecen dignas de destacar:
- Fuertes procesos de externalización: las instituciones públicas basan su desarrollo tecnológico en modelo muy fuertes de alianzas y externalización, uno de los mayores desafíos para tener procesos de externalización exitosos, es definir los incentivos correctos para las partes (proveedor y clientes), en general en nuestro país los incentivos están asociados a temas operacionales, cantidad de transacciones, volumen de datos, niveles de servicio de continuidad operacional. La evolución que está teniendo en el mundo es que los incentivos se muevan hacia los resultados y la calidad de los producto/servicios. Esto orienta el servicio hacia la calidad y no hacia el volumen. En nuestro país se han cuestionados muchos los esquemas de externalización probablemente producto de historias por todos sabidas de malas experiencias, las que creo están directamente asociadas a no tener los incentivos correctos.
- Propiedad intelectual: Otro elemento que están adoptando las mejores prácticas es que cuando el estado compra soluciones a medida, la propiedad de la solución queda en el proveedor, pero el Estado puede hacer usufructo permanente de ella. Esto parece un contrasentido y claramente va en contra de los paradigmas instalados en directivos públicos y fiscalías, ¿cuál es la razón de esto? en el mundo privado la razón para que el cliente se quede con la propiedad de la solución es por un problema de ventaja competitiva, razón que no existe en el Estado, el Servicio de Impuesto Internos no compite con nadie y por lo tanto tiene sentido esa ventaja competitiva? o es preferible asegurarle su uso y adicionalmente generar la externalidad positiva de que exista un proveedor con un “producto” que pueda comercializar en otras latitudes, este enfoque es ampliamente usado en Singapur (se lo escuché a su encargado de políticas de industria TI). Ahora bien esto significa romper algunos paradigmas instalados en los procesos de adquisición, ¿si yo (estado) no soy dueño del código entonces de que soy dueño?.
Creo sería bueno evaluar el impacto de las directivas mencionadas y buscar mecanismos para que nuestro estado se transforme en un mejor comprador de tecnologías, ya con ello producirá un mejoramiento de la industria TI nacional.